Ocio

Menú secreto

Ronald Schneider

Todo restaurante tiene sus platos secretos, creados para complacer los caprichos de sus comensales más preciados. Con el tiempo, alguno de estos platos logran pasar a la primera fila del menú, mientras que otros jamás se preparan mas de una docena de veces al año.

Hoy decidí revelar algunos de los secretos mejor guardados del restaurante La Divina Comedia, ubicado en la calle 71 No. 5-93 de Bogotá.

Este italiano se ha venido posicionando como uno de los mejores de la ciudad. Las filas para conseguir una mesa en las horas de almuerzo son largas, pero cómo valen la pena de esperar. Su propietario, Sergio Martin, siempre esta rondando las mesas y hablando con los comensales, solo de vez en cuando vez que desaparece y se mete en la cocina. Es ahí cuando la magia está por suceder, algún pedido especial apareció entre las comandas y a Sergio le gusta asegurarse que cada uno de sus platos, sobre todo los secretos, se preparen a la perfección.

Los ‘Espagueti a la Rafi’ es un plato perfecto para el que quiere comer consistente pero con un toque ligero. En honor a alguien muy especial para mi, como lo fue mi padre, Sergio decidió seguir la tradición de sus pastas favoritas y servir estos espaguetis con crema y alcachofa, coronados con un poco de ralladura de limón. Esta es una preparación donde se refleja la frescura y el carácter del honrado.

La milanesa de ternera acompañada con pasta al pesto tartufato es mi debilidad. Cada vez que quiero salir a comer algo sencillo pero repleto de sabor, este es el primer plato que aparece en mi cabeza. Para mí es perfecto: la cremosidad del tradicional pesto, mezclado con un poco de crema y aceite de trufa, elevan este clásico a otro nivel.

Para aquellos que están buscando saciar su apetito hasta el día siguiente, sin duda alguna recomiendo la lasaña con salsa rosada, panceta, prosciutto y Petit Pois. Ridículamente bueno sería mi forma de describir este plato. No tiene nombre ni seguidores, en realidad salió en mi ultima visita mientras probaba un plato muy tradicional, que viene bañado en esta salsa. El bombillo automáticamente se me encendió y con la confianza que le tengo a Sergio, mande a preparar esta combinación. No se arrepentirán de probarla.

El postre secreto y la guindilla del sundae es el ‘Affogato’ que no es más que una bola de helado de leche Klim, espolvoreada con cacao y una taza de café espresso al lado. La idea de este postre, como su nombre lo indica, es ahogar el helado con el café. Una vez viertes la taza en el pocillo del helado, el juego de sabores y texturas comienza a aparecer, y te aseguro que quedaras enganchado.