Verstappen es el rey de Las Vegas en la Fórmula 1 con su victoria 18 de la temporada

El neerlandés Max Verstappen de Red Bull cantó "Viva Las Vegas" tras conseguir su victoria 18 de la temporada, un récord, y unirse a Sebastian Vettel en el tercer puesto de la lista de pilotos con más triunfos en la historia de la Fórmula 1.

La victoria en una noche espectacular en la Ciudad del Pecado fue la 53 de la carrera del triple campeón, y la sexta consecutiva, y llegó después de una penalización de cinco segundos por obligar a Charles Leclerc, de Ferrari, a salirse de la pista en la salida y de una colisión con George Russell, de Mercedes.

Leclerc terminó segundo después de salir en la pole position, perder y recuperar el liderato y volver a perderlo antes de adelantar al mexicano Sergio Pérez en la última vuelta para negar a Red Bull su séptimo doblete de la temporada.

La victoria fue la vigésima de Red Bull en 21 carreras, otro récord para una sola temporada, y ofreció una competencia que cumplió con las expectativas en el retorno de la Fórmula 1 a Las Vegas por primera vez desde la década de 1980.

También completó un barrido de tres victorias en Estados Unidos en 2023 para el neerlandés de 26 años, que también dominó en Miami y Austin.

"Fue difícil", dijo Verstappen, cuyo traje de carrera rindió homenaje al mono característico del difunto "Rey del Rock and Roll", Elvis Presley.

"Intenté ir a por él en la salida, creo que ambos frenamos bastante tarde y entonces me quedé sin agarre y acabamos un poco abiertos, así que los comisarios me penalizaron por eso", comentó. "Eso nos retrasó un poco, tuve que adelantar a bastantes coches (...) Ha sido muy divertido".

Leclerc, cuyo equipo es el único que ha ganado a Red Bull esta temporada, mostró todo su espíritu de lucha tras el revés inicial. "Deseaba tanto esa victoria, pero ¡qué carrera!", jadeó por radio tras terminar a 2,070 segundos de Verstappen.

Fue la segunda carrera consecutiva que Pérez perdió en la última vuelta, luego de que el mexicano fue superado por el Aston Martin de Fernando Alonso en la línea de meta en Brasil.

Pérez al menos tuvo el consuelo de asegurar el segundo lugar en un campeonato ganado hace mucho tiempo por su compañero de equipo - otra primicia para Red Bull que nunca antes había terminado una temporada con sus pilotos uno-dos.

Carros de seguridad

Esteban Ocon fue cuarto con Alpine, Lance Stroll quinto con Aston Martin y Carlos Sainz de Ferrari sexto.

El siete veces campeón del mundo de Mercedes, Lewis Hamilton, fue séptimo, por delante de un degradado Russell, Alonso y el debutante australiano de McLaren Oscar Piastri, que se llevó un punto extra por vuelta rápida.

Mientras que Red Bull ganó ambos títulos hace tiempo, Ferrari recortó la distancia con el segundo clasificado, Mercedes, a cuatro puntos a falta de una carrera en Abu Dabi.

La falta de agarre fue evidente desde el principio, cuando los coches aceleraron al pasar por delante de los casinos y hoteles iluminados y por la avenida conocida como The Strip.

Cuando Verstappen forzó a Leclerc a abrirse para tomar la delantera, sin devolverle el puesto, Alonso hizo un trompo y fue golpeado dos veces por Valtteri Bottas, de Alfa Romeo, con Pérez también involucrado.

El mexicano entró en boxes para cambiar el alerón delantero cuando se desplegó el coche de seguridad virtual, pero luego Lando Norris, de McLaren, motivó la salida del coche de seguridad real cuando se estrelló en la tercera vuelta. Norris fue trasladado al Centro Médico Universitario por precaución.

Cuando la carrera se reanudó en la séptima vuelta, los comisarios sancionaron a Verstappen con cinco segundos de penalización, pero él se encogió de hombros ante la decisión. "Sí, está bien, envíales mis saludos", dijo al ingeniero de carrera Gianpiero Lambiase.

Leclerc retomó el liderato en la vuelta 16, con Verstappen en boxes y cumpliendo la penalización con una parada de 7,7 segundos que le hizo caer a la novena posición.

Pérez se puso al frente en la vuelta 22 cuando Leclerc entró a boxes, con el mexicano también ayudado por el coche de seguridad que se desplegó de nuevo en la vuelta 27 para recuperar escombros del choque entre Verstappen y Russell, que recibió una penalización de cinco segundos.