Zara ensaya en Londres su tienda del futuro

Inditex prueba una nueva fórmula para afinar su modelo integrado de tiendas físicas y venta online. El grupo textil abrirá hoy en el centro comercial de Westfield, en Stratford (Londres), su primera tienda en el mundo dedicada íntegramente a la realización y recogida de pedidos online. Se trata de un Zara de 200 metros cuadrados de carácter temporal -estará abierto hasta el mes de mayo-, ya que ocupa parte de la flagship que el grupo está renovando en ese mismo centro.

El nuevo concepto de tienda tendrá una colección limitada de prendas de señora y caballero que podrán ser adquiridas en el local, pero no de forma directa sino a través de un pedido online. De hecho, la oferta no se limitará a esas prendas, ya que los empleados del establecimiento contarán con tabletas y dispositivos móviles para poner a disposición de los clientes todo el catálogo de Zara. De la misma forma, los clientes podrán recibir el pedido en casa o en la tienda, en el mismo día si la orden se realiza antes de las 2:00 p.m., o al día siguiente si se hace por la tarde.

El establecimiento, donde los clientes también podrán realizar cambios o devoluciones, contará con la última tecnología. Por ejemplo, los clientes podrán pagar los pedidos sin pasar por caja a través de un sistema de datáfonos con bluetooth. Además, contará con unos espejos-pantalla para mostrar a tamaño real, mediante el uso de tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia), sugerencias de estilismos y prendas a los consumidores.

APERITIVO
La tienda efímera para pedidos online de Zara en Stratford será un aperitivo para el nuevo modelo de tienda que el grupo con sede en Arteixo prevé inaugurar en esa ubicación. Inditex prepara una flagship de 4.500 metros cuadrados para este establecimiento, que será el primer Zara del mundo con cuatro secciones: señora, caballero, niño y online. "Supone un paso más en la estrategia de integración de nuestras tiendas físicas con el mundo online, que constituye una seña de identidad de nuestro grupo", señaló ayer Pablo Isla, presidente de Inditex.

Además de la apuesta por una sección online en tienda, el local de Londres incorporará un nuevo diseño de interiores más diáfano y una fachada a doble altura sin escaparates. En la planta superior, esta fachada estará acristalada e incluirá sensores para detectar la presencia de clientes con el objetivo de proyectar imágenes sobre el cristal cuando estos se acerquen.

La tecnología también será protagonista en el interior de su nueva tienda. Inditex incorporará un punto automatizado de recogida de pedidos online, un servicio que el grupo textil viene probando durante los últimos meses en su tienda Zara de Marinaleda (A Coruña). El sistema funciona con un lector óptico que escanea un código QR o permite teclear un PIN que cliente recibe cuando realiza una compra a través de la página web de Zara. Al otro lado de la pared, un robot autónomo se mueve por un almacén -en este caso serán dos-, donde se pueden gestionar hasta 2.400 paquetes de forma simultánea y, una vez que encuentra la entrega asociada al pedido, la deposita en un buzón. Todo el proceso se puede realizar sin que el cliente necesite interactuar con los trabajadores de la tienda, lo que promete agilidad a la hora de realizar la recogida de la compra.

El mismo concepto de ahorrar tiempo y mejorar la experiencia del consumidor está detrás de las cajas de autopago que también incorporará la tienda de Stratford. El sistema identifica las prendas y el cliente sólo tiene que validar que lo ha hecho correctamente antes de pagar con su tarjeta o su móvil, a través de las apps de Zara e Inditex (InWallet).