Bogotá
viernes, 14 de marzo de 2014
La capital de la República es el prototipo de una ciudad colapsada en movilidad. La ausencia del metro, de vías elevadas, el estado de deterioro de la malla vial, la gran cantidad de vehículos particulares, aproximadamente 1.389.531 en 2013, generan en Bogotá un caos de movilidad que padecemos sus habitantes.
Transmilenio por la Carrera Séptima hasta la Calle 100 debía haberse empezado en 2012 y hasta ahora hay servicio de buses duales complementarios que van desde el centro internacional, o la estación del Museo Nacional, hasta la Calle 76 y no hay ni estaciones ni carril exclusivo. Ahora se anuncia un metro ligero que por supuesto va a tomar más tiempo, por lo menos hasta 2020. Para poder descongestionar el sistema de Transmilenio se ha hecho el anuncio de tomarse un carril de los particulares en la Avenida Caracas y la Autopista Norte. Sin embargo la medida se quedó solo en anuncio, no se ha hecho nada y los sucesos de las últimas semanas indican el descontento de la ciudad. Se requieren soluciones a corto plazo que más que nada deben ser temporales, mientras llegan las de mediano y largo plazo.
De otro lado, según el Dane, la economía de la ciudad no ha tenido su mejor desempeño. Por ejemplo entre el III trimestre de 2009 y el II trimestre de 2012 las ventas del comercio al por menor tuvieron un crecimiento constante y promedio de aproximadamente 11%, pero a partir de ahí, éste bajó a 5% o 6%. En 2009 los crecimientos fueron negativos en los primeros trimestres pero para el último mostraron una buena recuperación. En 2010, el promedio trimestral fue de 11,1%; en 2011 fue de 11%; para 2012 fue de apenas un dígito (6,125%); en 2013 el promedio trimestral fue de casi 5%. Lo mismo ha pasado con el empleo en el comercio, mientras en 2011 el promedio de crecimiento en el personal ocupado era de 8,5%, en 2012 fue 7,1% y en 2013 fue 3,4%.
Durante el IV trimestre de 2013, la producción, las ventas y el personal ocupado del sector fabril de Bogotá disminuyeron en 5,2%; 1,3% y 2,2% respectivamente, con relación a igual período de 2012. Mientras en 2010 y 2011 la producción tuvo una variación positiva, de ahí en adelante se muestra un descenso.
Frente a la seguridad, según una encuesta de la Cámara de Comercio de Bogotá, a primer semestre de 2013 mostraba subidas en la victimización, en el último semestre de 2010 los niveles de victimización estaban al 20%, para el primer semestre de 2013 estaban en 38%, eso quiere decir que el 38% de los encuestados respondieron que él o alguno de los miembros de su hogar, fue víctima de un delito.
Acorde con el Índice de Competitividad Departamental de 2013, que publicó por primera vez el Consejo Privado de Competitividad, Bogotá ocupa el primer lugar, pues lidera en los tres factores analizados, de condiciones básicas, eficiencia y sofisticación y diversificación, sin embargo se raja en algunos de los componentes de estos factores como en cobertura en salud, en deserción en la educación superior, en subempleo por competencias y desempleo, en eficiencia en mercado de bienes, en bajo desempeño en la variable de carga tributaria para las empresas, en espacio en aulas educativas de establecimientos oficiales, en inversión pública, en agua potable y saneamiento básico y en porcentaje de vías pavimentadas en buen estado.
El programa de ‘Basura Cero’ no solo empezó con el pie izquierdo sino que todavía no se ha podido organizar bien y sufre aun la improvisación en este campo.