Editorial

Generar más empleos asalariados

<p>No todo es malo: “Le estamos ganando la batalla al desempleo, no la hemos ganado pero ahí vamos”, Santos</p>

El dato más optimista para el mercado laboral en Colombia es que en 16 de las 23 ciudades estudiadas por el Departamento Nacional de Estadística, Dane, se redujo la tasa de desempleo durante el año pasado; 12 ciudades tuvieron una cifra de un dígito y las diferencias se han reducido notablemente de una región a otra, ya no hay ciudades con 18% o 19% frente a otras de 7% y 8%, como sucedía antes. Es un hecho elocuente que la cifra de desempleo subió de 8,4% a 8,7%, en el último mes del año, pero en términos generales la tendencia mejora, pues entre enero y diciembre pasados, el desempleo fue de 9,1%, a pesar del leve aumento decembrino.

Enhorabuena las autoridades económicas están logrando que el desempleo de un dígito se instale en las cuentas macroeconómicas, dado que por segundo año consecutivo sucede esta tendencia extraordinaria para Colombia. No en vano nuestro país es uno de los pocos en la región que ha bajado la pobreza y la pobreza extrema; en palabras del presidente Juan Manuel Santos, “una de las formas para lograr ese objetivo es a través de la generación de buenos empleos”. Y esa debe ser la línea a seguir, mantener el crecimiento en la generación de empleos con salarios y condiciones laborales más formales. Sin duda alguna, el mejoramiento en la calidad de vida y en la educación de las generaciones futuras tiene que ver con los empleos remunerados, de tal manera que los niños puedan ir a los colegios más tranquilos, pues sus padres están trabajando para satisfacer sus necesidades básicas.

La importancia del trabajo formal es justamente esa, que los más jóvenes puedan completar sus ciclos educativos de tal manera que se rompa la cadena de miseria. Desde comienzo del siglo XXI, en 14 años, Colombia no había visto estos niveles de ocupación y participación, y esto es lo que explica la reducción del desempleo. En diciembre, 239.000 personas encontraron trabajo, y más de 500.000 ciudadanos lo hicieron en el último trimestre del año. No sucede los mismo en todas las ciudades, hay unas en donde se generan más trabajos y otras en donde el desempleo cede, pero sigue siendo un problema crónico. 

Las tres ciudades con menor desempleo entre octubre y diciembre fueron Montería, con 7%; Barranquilla con 7,4%, y Bogotá con 7,7%. Entre tanto, las que más desocupados registraron fueron Quibdo, con 14,2%; Armenia, 12,8%, y Popayán, con 11,8%. En todo 2014, las ciudades que registraron la menor tasa de desempleo fueron Bucaramanga, con 8,2%; Barranquilla, 7,9%, y San Andrés se llevó el primer puesto con 7%. Las que registraron el mayor número de desempleados fueron Quibdó con 12,5% y Armenia y Cúcuta con 15% de la población.