Editorial

Hay que seguir la compra de dólares

La extensión de las políticas de la Reserva Federal dispararon el peso y la devaluación del dólar regresa como karma

El próximo viernes la Junta Directiva del Banco de la República tiene su reunión periódica para revisar en conjunto las políticas de intervención monetaria, entre las cuales se pondrá sobre la agenda la compra de dólares que hace el Emisor diariamente y que se ha estimado en US$30 millones diarios, con el fin de mantener una tasa de cambio por encima de los $1.900, que no es otra cosa que una simple referencia que beneficia a los exportadores. Otro de los puntos cruciales que deberán revisar los codirectores del Banco es la meta de crecimiento económico para este 2013 que ya se encamina hacia sus postrimerías y la cifra que se proyecte para el nuevo año. Y el tercer punto es la tasa de interés al sistema financiero que hoy se encuentra en  3,25% y que sobre su nueva rebaja hay mucha expectativa, todo con el fin de que la dinámica de consumo se reactive y se alargue por varios meses más el apetito por adquirir créditos hipotecarios.
Son tres puntos fundamentales, ninguno más importante que el anterior, pero es en la compra de dólares que radica la decisión de coyuntura. La economía derivada de las exportaciones no puede ver cómo el dólar regresa a tiempos de los $1.720 de comienzo del año, ese sería el peor de los escenarios justamente cuando las políticas públicas están encaminadas a fortalecer las ventas de productos y servicios en el exterior con el fin de aprovechar los 15 tratados de libre comercio que empiezan a estar vigentes. Es cierto que el precio bajo de dólar es bien aceptado por empresas importadoras y para los turistas nacionales que hacen sus viajes de fin de año, pero una divisa estadounidense un poco revaluada es más benéfica para generar empleos.
Los codirectores del Banco de la República tienen como protocolo no hablar de esos temas (tasas de interés, compra de dólares, metas de crecimiento) antes de su reunión, pero la economía empieza a recuperar los niveles de optimismo que la han llevado a ser un referente en la región, y en ese orden de ideas se necesita que nuestras autoridades monetarias independientes actúen con grandeza en momentos en que se toma un segundo aire. Pero hay un punto definitivo que sí debe tener en cuenta el Emisor, se trata de la Ley de Garantías que pronto entrará en vigencia y que congelará el gasto público por varios meses con el fin de evitar hacer política con recursos presupuestales. Sin duda eso es un golpe a la tenue recuperación que se empieza a ver.
¿Qué debe hacer el Banco? Primero seguir comprando dólares en el mercado para mantener la divisa  por encima de los $1.900; segundo mantener las tasas inalteradas en esos 3,25% para evitar explosiones en la cartera, y tercero enviar un buen mensaje a la economía para el cierre de año y ratificar la meta de crecimiento de 4,5% para 2013.