Editorial

Los enemigos del dólar Cárdenas

<p>Del dólar Cárdenas pasamos al ‘dolor de Cárdenas’; la moneda no cuaja por encima de los $2.000. ¿Una crisis de éxito?.</p>

Hace un año el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas (de lejos el capo del gabinete) anunció que el dólar se revaluaría y que el cambio de una unidad por pesos colombianos estarían por los órdenes de los $2.000. Y el vaticinio se le cumplió al final del año pasado, pero solo duró hasta hace un par de semanas cuando la todopoderosa banca JP Morgan anunció el pasado 19 de marzo que la participación de Colombia en el índice de deuda de emergentes aumentaría, lo que desencadenó que los inversionistas de este índice reorganizaran sus portafolios y por lo tanto tuvieran que comprar más TES colombianos para alcanzar el nuevo nivel. En términos callejeros: esto desencadena una entrada de cerca de US$10.000 millones a la economía local, bajando el dólar a valores muy dañinos para los exportadores nacionales.

Desde entonces el dólar ha caído $76,6 teniendo en cuenta sus precios de cierre. El máximo alcanzado en el año fue de $2.056,46 el pasado 26 de febrero, pero ayer registró el mínimo histórico de $1.913,80. A este ‘abrazo del oso’ por parte de la banca estadounidense, que traerá buenas noticias en el mediano plazo por la solidez de la economía colombiana, se le suma la expectativa por nuevas inversiones, pues tras la decisión de JP Morgan se genera un panorama positivo para los inversionistas que encontrarán en Colombia una opción rentable y segura para colocar capitales. 

Obviamente, los buenos datos macroeconómicos del Gobierno de Santos son otras de las razones de tener un peso fuerte. Tanto el buen comportamiento del PIB, como la inflación y la generación de empleo son datos que generan confianza inversionista y por ende mayor entrada de capital extranjero. Debemos aclarar que la caída del dólar no solo es un fenómeno puramente colombiano, si miramos las cifras de Perú, Brasil, Chile y México, las cosas son similares y sus monedas son fuertes frente al dólar.

Una noticia puramente local como es la venta de Isagen también puede tenerse en cuenta en esta suerte de motivos para que el llamado dólar Cárdenas no cuaje. Una economía emergente que registre una entrada de unos US$3.000 millones, no puede quedarse inmune. Por todos estos motivos es que debemos destacar el buen papel que cumple la Junta Directiva del Banco de la República que en sus pasadas reuniones decidió mantener la compra de divisas para mantener una tasa representativa del mercado que satisfaga a los exportadores. La economía va muy bien y poco a poco debe entenderse que la competitividad de las exportaciones no se debe lograr con base en el tipo de cambio, sino con estrategias propias en cada sector económico que trasciendan la política económica.