Editorial

Los tres tenores del IVA y el salario mínimo

Carrasquilla, Uribe y Duque, están jugando un “chico” de billar a tres bandas muy peligroso en el que los mensajes son claves para lograr los objetivos.

Editorial

En dos semanas la administración Duque llegará a su primer mes al frente de la Casa de Nariño, de los 47 que le quedan por delante hasta 2022 y hacer un balance del primer par de semanas, no solo es apresurado, sino improcedente. Pero hay un fino hilo conductor en este breve lapso que tiene que ver con el enrarecimiento del panorama económico y la incertidumbre empresarial que se ha ido sembrando. El primer hecho se desprende del anuncio de radicación en el Congreso, por parte del expresidente y senador, Álvaro Uribe, de una iniciativa que busca darle poderes al Presidente para que fije de manera extraordinaria un alza del salario mínimo. La propuesta ya está en manos del Senado y empezará a hacer su trámite respectivo ante el silencio profundo (¿cómplice?) del ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, y del mismo presidente Duque, quienes pese a tener la oportunidad de explicarlo a los empresarios y banqueros no han dado mayores luces de lo que va a pasar.

La segunda voz de una suerte de anuncios tripartidos a tres voces de tenores del salario mínimo y de la próxima reforma tributaria, tiene que ver con el anuncio ante los banqueros del Ministro de Hacienda de ampliar el IVA a todos los productos y servicios incluyendo todos los de la canasta familiar; con la salvedad que el impuesto a las ventas cobrado a los estratos más necesitados será devuelto. Esta voz sorpresa de IVA de 19% para todo, sonó mucho más aguda y fuerte que la del mismo expresidente con su incremento del salario mínimo de manera extraordinaria. Todo sucedió durante las dos semanas inmediatamente anteriores, que fueron signadas en la bitácora económica del país porque se llevaron a cabo los congresos anuales de los empresarios en la Andi y de los banqueros en la Convención Bancaria de la Asobancaria; eventos tradicionales en los que los ministros y presidentes de turno acostumbran a hacer anuncios fundamentales para el desarrollo económico.

Pero falta la voz más esperada, la del Presidente, quien no ha sonado para nada, más aún no mencionó ni una sola palabra de la idea de incrementar el salario mínimo ni mucho menos del IVA generalizado incluyendo la canasta familiar. Ese silencio es elocuente e indica que hay un juego a tres bandas que debe irse develando para que los empresarios puedan hacer sus presupuestos anuales en septiembre, que ya toca a las puertas y señala que el año entró en sus últimos cuatro meses. El ministro Carrasquilla es un convencido de que la reforma más urgente no es la tributaria, sino la laboral y que el salario mínimo es uno de los obstáculos más grandes para que las empresas sean más competitivas; convencimiento que riñe con la idea del expresidente. Parecería imposible que el partido de Gobierno, el Presidente y su Ministro no se hubieran hablado para tantos anuncios a sotto voce, situación que ha dejado una estela de nubarrones de creciente preocupación entre empresarios y banqueros, quienes por ahora no se animan a lanzar críticas ante la generalización del IVA, con canasta familiar a bordo e incremento del salario mínimo. Ambas propuestas no han sido bien acogidas por ahora. Si bien tienen defensores, habrá que esperar los proyectos formales en el Congreso para conocer en qué lugar de los articulados está la zanahoria, pues el garrote en los costos ya empieza a aparecer.

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Iván Duque - Álvaro Uribe Vélez - Alberto Carrasquilla - IVA - Reforma Tributaria - Salario