Editorial

México no se puede desacelerar

Gráfico LR

La llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México tiene un triple reto: hacer valer el liderazgo femenino, mejorar la senda de Amlo y crecer la economía

Editorial

Diario La República · México no se puede desacelerar

Si hay un frente común en el que deben batallar hoy en día los presidentes de América Latina, y no solo de la región sino del mundo, es el de la desaceleración económica. Es un mal que hoy tiene a buena parte de los líderes políticos contra la pared y a otra parte de ellos aprovechando los tiempos difíciles para masificar ideas de populismo, que en pleno siglo XXI resultan trasnochadas.

Mientras en Colombia hace casi dos años se dio un giro a la izquierda, con la llegada del presidente Gustavo Petro; lo mismo que sucedió en Brasil, cuando se pasó de Jair Bolsonaro al regreso de Luiz Inácio Lula Da Silva, en México todo sigue igual, pues triunfó la continuidad de una política liderada por Andrés Manuel López Obrador, mejor conocido como Amlo, quien siempre ha dicho que quiere un “México justo y más próspero”.

Este es precisamente uno de los tres retos que debe superar Claudia Sheinbaum en la Presidencia de México: continuar la senda de Amlo, que ha estado centrada en decisiones polémicas, como la construcción del Tren Maya, la creación de la figura de los “superdelegados”, generando más burocracia, o la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.

El segundo reto, y el más notorio de todos, es que deberá demostrar, especialmente en una sociedad marcada por el machismo, que el liderazgo femenino es eficiente. Sheinbaum es la primera mujer presidente en 200 años de haberse fundado México como república, lo que imprime más que altísimas expectativas, una necesidad de exigir resultados. Preparación y experiencia tiene. Es física de profesión y tiene un doctorado en Ingeniería en Energía en la Universidad Nacional Autónoma de México, Unam; fundó el partido político Morena, que llevó a Amlo a la Presidencia, y ha ocupado cargos públicos, entre ellos, fue Secretaria de Medio Ambiente.

Y si esto no basta, al conocer la noticia de su triunfo, dijo ante millones de personas que no está sola. “Como he dicho en otras ocasiones, no llego sola. Llegamos todas, con nuestras heroínas que nos dieron patria, con nuestras ancestras, nuestras madres y nuestras hijas”, indicó.

Como si no fuera suficiente con esto, el tercero y más importante de los retos a superar es el de garantizar una economía sólida y creciente. México es la segunda economía más grande de América Latina, con un crecimiento sostenido de 3,4% interanual durante cinco trimestres consecutivos en años pasados, pese a que presentó una desaceleración a 2,5% en los últimos tres meses de 2023.

Datos al cierre del primer trimestre de 2024 indican que la economía mexicana apenas se expandió 1,9%. Aunque representa una cifra muy por debajo de las proyecciones, es alto de cara a las grandes economías. La tendencia creciente debe mantenerse en medio de un contexto internacional que no ayuda en nada: elecciones en Estados Unidos en noviembre, que podrían darle un nuevo vecino a México con posiciones encontradas en temas como inmigración; una guerra comercial entre EE.UU. y China, que obliga a México a sacar provecho del nearshoring; y la revisión del T-MEC (Tratado México-Estados Unidos-Canadá) en 2026, por mencionar algunos.

El Banco de México ya habla de una “debilidad de la actividad económica”, un diagnóstico al que Sheinbaum le deberá buscar el mejor remedio.

TEMAS


México - Claudia Sheinbaum - Andrés Manuel López Obrador