No hay que olvidar que el Valle es estratégico

El Valle del Cauca es el tercer departamento que más contribuye al Producto Interno Bruto Nacional, con una cifra de 9,7%. Un dato que aumenta hasta 13,5% si se le agregan las contribuciones de los otros departamentos que conforman el suroccidente: Cauca, Nariño y Chocó. Es una de las zonas de pujanza industrial y agropecuaria, hub comercial, logístico y de innovación, y cuna de la biodiversidad, sin embargo, vive amenazada por la inseguridad.

Pese a esto, la economía vallecaucana no para. En 2024 mostró un crecimiento económico de 2%, de acuerdo con el Dane, una cifra superior a 1,6% del total nacional. En cuanto a la actividad exportadora, en julio de este año, el departamento mostró un incremento mensual de 27,9% en sus ventas externas, un dato que supera en 5,6 puntos porcentuales el promedio nacional.

De acuerdo con un informe de la Cámara de Comercio de Cali, “este desempeño no solo sigue la tendencia nacional, sino que avanza a un ritmo más acelerado, lo que fortalece su competitividad y contribuye significativamente a la diversificación de la base productiva del país. Los principales departamentos del país experimentaron crecimientos en el valor de sus exportaciones en lo corrido de 2025 a julio. El Valle del Cauca registró el segundo mayor crecimiento (17,2%) en el valor de sus exportaciones, al pasar de US$1.328 millones en enero-julio de 2024 a US$1.556 millones en el mismo periodo de 2025”.

En términos de inversión extranjera, el Valle del Cauca recibió más de US$225 millones gracias a los proyectos de 22 empresas de diversas industrias, que contribuyeron a la creación de 2.070 empleos en el departamento. Y la meta para este año de InvestPacific es atraer 21 proyectos que alcancen US$320 millones y generen 2.100 empleos para la región.

Una de las grandes ventajas del departamento para las compañías es su cercanía al puerto de Buenaventura, clave para la movilización comercial del país, pues mueve 11,42% de la mercancía en el territorio nacional. Desde Buenaventura se exportan 14,7 millones de toneladas, es decir, una participación de 34,1% del total nacional.

El Valle del Cauca también se ha consolidado como el gran receptor de remesas, pues según datos del Banco de la República, es el primer departamento al que llegan estos flujos de dinero. Durante 2024, los ingresos por este concepto alcanzaron US$3.024 millones.

El turismo también es fuente de negocios en el departamento, que ha trabajado fuertemente en una narrativa alrededor del entretenimiento, la salud y la biodiversidad para atraer a visitantes tanto nacionales como internacionales, que para el año pasado se tradujeron en 7 millones de turistas y una derrama económica de US$860 millones.

Y en innovación la región no se queda atrás, pues según el Colombia Tech Report 2025, el ecosistema de startups en Cali creció 75% frente a 2023; y el Valle del Cauca registró el mayor crecimiento de la industria TIC del país con 4,9% en su PIB sectorial, por encima del promedio nacional.

No queda duda de que el Valle es estratégico, no solo para el suroccidente, sino para la economía nacional. La inseguridad no puede ser la amenaza que comprometa las buenas cifras de la región, ni los proyectos por venir.

En 2024, el Valle captó la atención global por su biodiversidad, su papel en el sector agroindustrial y el impacto de la COP16, un impulso para la actividad económica y productiva que no se puede desaprovechar por las acciones de los grupos ilegales.