Un pacto capital por el metro

Siempre que se da la ocasión, lo hacemos, para que no se nos olvide que quien no revisa su historia está condenado a repetir los mismos errores. Recordamos que fue en este diario donde se publicó la primera noticia sobre los estudios del metro para Bogotá. En la primera página de su edición inaugural, el 1 de marzo de 1954, se leía una breve noticia que se titulaba: “Habrá informe para la construcción del subway en la Capital”, en la que se narraba que “a mediados de la próxima semana será entregado al Alcalde de Bogotá el informe redactado por los técnicos alemanes sobre la construcción de un ‘subway’. Como se sabe por informaciones ya conocidas, el proyecto considera la posibilidad de establecer la mencionada línea de transporte subterráneo desde el Hospital de San Carlos, situado al sur, hasta bien al norte, posiblemente a terminar en la autopista”.

Repetimos incansablemente: “esto sucedió durante el breve mandato del general Gustavo Rojas Pinilla, y el alcalde de Bogotá, que había puesto el Dictador, era el coronel Julio Cervantes. Luego vino el Frente Nacional y desde entonces nadie desde el Gobierno Nacional ni desde la Alcaldía Mayor ha podido adelantar el metro como un sistema masivo de transporte. Una situación similar y muy contemporánea a la del metro es la búsqueda de la paz. Todos los gobiernos desde hace más de medio siglo han buscado afanosamente a través de la guerra y de los diálogos conquistar la esquiva reconciliación nacional, sin lograr avanzar”. 

Y el presidente Santos no es la excepción a la regla y ha emprendido trabajo en esos dos frentes: poner a andar el metro para Bogotá y lograr acuerdos de paz con la guerrilla. Ayer se supo que el Banco Mundial avaló la firma del contrato correspondiente a los estudios definitivos para el metro pesado, y que el alcalde Gustavo Petro y el Presidente se reunirán pasado mañana en la Casa de Nariño para adelantar esta obra que se ha convertido en un objetivo mega de todos los presidentes de turno, y por supuesto de los alcaldes.

¿Qué sigue en este sueño de que Bogotá tenga metro? Ahora se debe legalizar el contrato, una situación que no debe tardar más de 20 días. Posteriormente, se harán estudios, diseños y acuerdos comunitarios que definirán el trazado definitivo, los túneles, la geotecnia, las instalaciones electromecánicas, y el número de estaciones. En todo este proceso puramente técnico se pueden tardar año y medio (debe estar listo al finalizar 2014), y una vez se surta el proyecto en sí, se armarán los pliegos de la licitación para la construcción del megaproyecto. Se calcula que la construcción esté lista después de 2020. Qué bueno es soñar con que Bogotá tenga un metro que demuestre el progreso de Colombia. Ojalá deje de ser un sueño para que se convierta en realidad.