Editorial

Ya llega el esperado día de ‘San Reficar’

<p>En noviembre arranca una de las operaciones industriales más grandes de la historia colombiana luego de muchos retrasos y sobrecostos-</p>

En la actual coyuntura de la economía colombiana es mejor ver las cosas por el lado amable, ser mucho más optimistas que pesimistas. Y esa es la mirada que queremos darle al caso de la Refinería de Cartagena (Reficar) en lugar de ahondar en males y pesares, sobre todo en los sobrecostos y permanentes fallas de su entrada en operación. Es una de las plantas más sofisticadas de América Latina, está previsto que cumplirá con los más altos estándares ambientales y permitirá duplicar la capacidad de refinación y producción de derivados del petróleo.

El próximo 10 de noviembre comenzarán los días críticos de pruebas para el cargue de la polémica Reficar, seguramente empezará por refinar los combustibles menos demandados como son la gasolina que se usa en aviación y el acpm. Ya el Gobierno Nacional dijo que se llenará inicialmente con 80.000 barriles de petróleo cien por ciento extraído en terreno colombiano. Se espera que el 15 de enero ese gran tanque se llene con 120.000 y 140.000 barriles diarios, de tal manera que en el primer trimestre de 2016 se pueda producir gasolina de alto octanaje y combustibles con mínimos niveles de azufre, según los anuncios de los expertos.

La economía colombiana, especialmente la industria, tienen los ojos puestos de esta gran operación de refinación que puede recobrar el ritmo perdido de este sector. La plena entrada de Reficar puede representar el despegue de las cifras industriales que han caído desde hace varios meses. El proyecto de expansión y modernización de la refinería comenzó en octubre de 2011 con el objetivo de duplicar la capacidad de procesamiento de la planta de Ecopetrol que ya existía en ese puerto del Caribe. La idea es pasar de 80.000 a 165.000 barriles por día a finales del próximo año. Todo un gran despegue industrial que no tiene precedentes en Colombia y que sufrió grandes problemas.

La obra que se pondrá en marcha en noviembre es el proyecto de mayor envergadura que ha emprendido la industria nacional en toda la historia y su operación le cambiará la cara el comportamiento del sector para los años venideros, pero lo más interesante y digno de revisar como caso empresarial, es que es la operación financiera colombiana más grande de todos los tiempos pues comprometió recursos prestados por más de US$4.000 millones. No podemos olvidar, siendo optimistas por el desenlace de las obras, que la idea comenzó en manos de Glencore en 2009, pero que posteriormente pasó a Ecopetrol donde sufrió grandes problemas burocráticos cuando el hoy presidente de la empresa mixta, Juan Carlos Echeverry era ministro de Hacienda y tuvo que enfrenar la conflictiva alta gerencia del proyecto. Por fortuna ya hay luz al final del túnel y hay fecha de empezar el llenado de combustible para su pleno funcionamiento.