Conozca cómo darle un segundo uso a las botellas plásticas y reducir la contaminación

Para nadie es un secreto que el plástico es uno de los mayores contaminantes del planeta y que año tras año acumula toneladas que tardan mucho tiempo en descomponerse.

Según la Organización para las Naciones Unidas (ONU), Latinoamérica genera a diario 17.000 toneladas de residuos de plástico, cifra que se queda corta si se sabe que China al día produce residuos plásticos equivalentes a 828 estatuas de la libertad, pues Asia es el continente con mayor producción de plástico en todo el mundo, según cifras de GreenPeace.

Es por esto que las personas y compañías comienzan a generar alternativas que permiten darle una segunda vida a este plástico, evitando que se convierta en el responsable de contaminación y de cientos de animales que mueren por ingerir estos desechos.

Precisamente, uno de los que más se emplean para darles una nueva vida son los de las botellas, pues pueden llegar a producirse más de 500.000 millones de botellas de plástico de un solo uso cada año.

Según Laura Reyes, directora ejecutiva de Cempre Colombia, "actualmente, hay muchísimas maneras de transformar el plástico y, por supuesto, siempre hay que darle luz a la creatividad. Sin embargo, nuestra invitación es a mantener el plástico en el ciclo productivo para mantener su valor en el mercado y evitar la demanda de nuevos plásticos".

Esto, pues según Reyes, hoy en Colombia se aprovecha 32% de los envases y empaques plásticos puestos en el mercado, pero solo 3% es realmente reincorporado en nuevos envases y empaques plásticos.

Esta problemática es la que ha motivado a entidades como Pacto por los Plásticos Colombia, coordinado por Cempre, a "aumentar dichas cifras a 50% y 30%, respectivamente, de aquí a 2030", añade Reyes, quien recalca que las botellas para bebidas como las de PET son 100% reciclables.

En este sentido, es importante resaltar las inversiones y esfuerzos que se han hecho en el país en torno a la economía circular de las botellas plásticas. Por ejemplo, Reyes explica que Postobónes una marca que ha apostado porque sus botellas de agua sean 100% recicladas y 100% reciclables.

Entonces, hay varias formas de emplear dichas botellas. Por ejemplo, en un ámbito más artesanal se pueden usar para hacer materas, linternas caseras, cartucheras, árboles de navidad con botellas PET verdes, construcción de carros con paneles solares como maqueta escolar, comederos para pájaros, sistemas de riego, entre otros.

Pero, si se habla de la transformación para darles una segunda vida útil, se podrían pasar por un proceso de producción que las convierte en plástico que puede usarse nuevamente con polietileno. Con este se puede hacer madera plástica, juguetes, elementos de aseo, o incluso, bolsas para la basura, esto siempre dependerá del tipo de plástico.

Justamente, Reyes dice que en el caso de las botellas de materiales como el polietileno o polipropileno las tendencias van en el mismo sentido de fomentar los modelos de reúso, por ejemplo, en rellenado de algunos detergentes o en la incorporación de material reciclado, para que al igual que el PET se aumenten las tasas de reciclaje.

También del lado de las empresas, para que esto sea posible, se destaca el ecodiseño, al hacer botellas menos cargadas de color, con elementos de fácil separación como las etiquetas, tapa o las manijas y con una reducción de los espesores sin comprometer su funcionalidad. Esto, "para tener una cadena más responsable con el uso de los recursos naturales desde el inicio", añade Reyes.

"Si bien es cierto que hay avances muy destacables en términos de las tendencias, sería valioso incrementar la recolección y el reciclaje de elementos como la cosmética y el aseo y, por supuesto, ver nuevos modelos de reúso y modelado para seguir avanzando hacia lo que tiende el tratado global de los plásticos frente a hacer una mejor gestión de este material para evitar la contaminación en los océanos", concluye Reyes.