Es así como las empresas de colchones apoyan el cuidado del medio ambiente
jueves, 5 de diciembre de 2019
Cambio en los elementos de confección y el material de los empaques son algunas de las formas en las que contribuyen al cuidado del agua y ciclo de uso
El colchón es uno de los productos que dura más años y, aunque puede pensarse que por eso no es tanta la contaminación que genera, la realidad es otra. Por eso, empresas como Boxi Sleep, Americana de Colchones y Colchones Spring están enfocando parte de sus esfuerzos en lograr que sus operaciones disminuyan el impacto ambiental.
Boxi Sleep, que es reconocida por enviar los colchones en una caja, decidió crear el proyecto ‘Más árboles, menos cajas’, con el que motiva a que sus compradores devuelvan las cajas en las que reciben sus Boxi Sleep, para que esta pueda ser reutilizada, al menos tres veces.
Santiago Varenkow, CEO de la empresa, manifestó que esto se hizo porque “vimos un potencial y era qué pasaba si reutilizábamos las cajas que antes se les daba un solo uso. Boxi es una empresa comprometida con mejorar el medio ambiente y por eso las personas que devuelven la caja reciben un beneficio, pero además por cada caja reutilizada se siembra un árbol. Respondemos a la necesidad de darle un nuevo uso a la caja, pero también que los clientes sientan que están contribuyendo”.
Otro de los puntos débiles que tienen estas empresas es el uso de diferentes elementos que pueden llegar a ser potencialmente contaminantes. Teniendo como base esto, Americana de Colchones decidió migrar a componentes naturales que generan menos contaminación y materiales derivados del petróleo. Armando Caycedo, gerente general de Americana de Colchones, afirmó que “otro de nuestros proyectos que estamos en piloto es entregando una porción importante de nuestras fibras que sobran al momento de fabricar los colchones, que no se han usado. Las entregamos y luego se utilizan en la producción de otros productos”.
Colchones Spring, por otro lado, apoyó a la construcción de una planta procesadora de fibra de coco en San Juan de Urabá, la cual es una de sus materias primas para la fabricación de diferentes colchones.
David Alba, jefe de marca Colchones Spring, explicó que “gracias al aprovechamiento integral de los residuos del coco en productos terminados se convierten en una alternativa agroindustrial funcionalmente superior a otros materiales. Los beneficiados de estos programas son más de 200 familias (repartidas en los dos programas), e invertimos más de $8.000 millones al año”.