La carne cultivada en laboratorio, una alternativa para combatir el cambio climático
viernes, 2 de agosto de 2024
El sector de la ganadería es responsable del alrededor de 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero según la FAO
Con un mundo cada vez más afectado por el cambio climático, la evolución del sector ganadero adquiere una relevancia importante. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO, este sector es responsable del alrededor de 18% de las emisiones de gases de efecto invernadero, superando incluso a los medios de transporte.
La principal fuente de estas emisiones proviene del modelo energético basado en combustibles fósiles, que representa 73,2% de la energía total. Sin embargo, al considerar la energía como un insumo para otros sectores, la alimentación resulta ser la actividad humana con mayor impacto ambiental.
En respuesta a esta problemática han surgido tendencias que promueven la reducción del consumo de carne. La carne cultivada, desarrollada mediante biotecnología, ofrece una alternativa sostenible y ética, permitiendo la producción de carne de vaca, cerdo, pollo o pato sin necesidad de sacrificar animales. Este proceso implica el cultivo de células animales en entornos controlados para crear productos cárnicos.
David Kaplan, director del Centro de Agricultura Celular de la Universidad de Tufts, explicó que la carne cultivada se obtiene al tomar células de animales y utilizarlas para hacer crecer la carne fuera del animal.
Este método presenta múltiples beneficios ambientales: reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en 92%, disminuye el uso de tierras en 95% y consume 78% menos de agua en comparación con la producción tradicional. Además, de acuerdo con los que le apuestan a esta alternativa de consumo, es una opción más segura, eliminando el riesgo de enfermedades zoonóticas al no estar en contacto con patógenos, y protege acuíferos y suelos de la contaminación.
“La carne cultivada no solo contribuye a la sostenibilidad del sistema alimentario, sino que también ofrece importantes ventajas ambientales y de seguridad, presentándose como una solución viable y beneficiosa para el planeta”, señaló Iñigo Charola, CEO de Biotech Foods.
Los retos del método: las células animales
Según el Consejo Europeo de Información sobre la Alimentación, Eufic, uno de los desafíos de la carne cultivada es su dependencia de células madre provenientes de animales vivos. Además, el medio de cultivo más comúnmente utilizado incluye suero fetal bovino, FBS, obtenido de la sangre fetal en mataderos, lo que implica que el proceso no está completamente exento de prácticas de sacrificio. Estudios han indicado que la producción de carne en laboratorio podría presentar problemas ambientales a largo plazo, particularmente en términos de emisiones de CO2.