Lana de FiberGlass filial del Grupo Saint-Gobain fue certificada como saludable

Desde Bélgica le llegó a FiberGlass, filial del Grupo Saint-Gobain, la certificación Euceb para sus productos en lana mineral de fibras de vidrio, que en el mercado nacional tienen dos presentaciones: Atac, para aislamiento termoacústico para cubiertas, y Frescasa, utilizado en construcciones.

Martín Vélez Duque, gerente de mercadeo de la empresa, explica que el reconocimiento de la certificadora europea ratifica la buena calidad de productos que son seguros para la salud humana.

“Las fibras de lana mineral de vidrio de nuestros productos presentan baja permanencia en el organismo y alta solubilidad biológica , quiere decir que se disuelven en los fluidos y son rápidamente eliminadas del cuerpo y los pulmones de forma que no implican ningún riesgo para nuestros clientes y empleados”, dijo.

FiberGlass tiene cuatro diferentes líneas de negocios: mantos impermeabilizantes en asfalto, en construcción para confort acústico y térmico, conducción de aire acondicionado y en industrial para ahorro de energía y conservación en los procesos. La Euceb, no obstante, aplica para las tres últimas.

Vélez explica que este reconocimiento es una nueva fortaleza de la compañía frente a sus clientes, integrado por 220 distribuidores y las principales empresas de la industria y la construcción.

Y también para que FiberGlass, con 194 empleados en sus dos plantas en Bucaramanga y Mosquera (Cundinamarca), mantenga sus números en crecimiento. En 2013, indicó su gerente de mercadeo, facturó por ventas $60.000 millones, es decir 4% más que lo obtenido en 2012.

“Esta certificación es un logro que demuestra que en FiberGlass estamos interesados en que nuestros productos protejan la calidad de vida y el medio ambiente”, puntualizó Vélez.}

Lanas minerales no son cancerígenas
La Euceb es la Junta de Certificación Europea de productos de lana mineral, cuyo propósito general es certificar y asegurar que un producto de este tipo no es nocivo con la salud de los clientes y los consumidores de las empresas que los elaboran, principalmente que no producen cáncer. Su certificación es sinónimo de calidad probada y fiable de acuerdo con un sistema definido, precisamente, de la vigilancia y los controles.