Una botella de plástico puede durar hasta los 700 años en descomponerse totalmente

¿En realidad los botilitos son la solución para evitar la contaminación genera por las botellas de plástico? Debemos comenzar aclarando que para poder producir una botella de plástico, dependiendo de la industria, se necesitan alrededor de 100 mililitros de petróleo.

Según Greenpeace, una ONG ambientalista, se estima que solo en la industria de las bebidas se producen 500.000 millones de botellas de plástico cada año, y se recicla alrededor de 9%. Teniendo en cuenta el primer dato, para esas 500.000 millones de botellas, se haría uso de cinco billones de mililitros (5.000 millones de litros) de petróleo.

El proceso de reciclaje comúnmente consiste en:

1. Recolección: las botellas se recogen por medio de programas de reciclaje, o contenedores en específico.
2. Clasificación: las botellas se clasifican según su tipo y color.
3. Trituración: las botellas son trituradas en pequeños fragmentos llamados escamas de PET.
4. Lavado y descontaminación: las escamas de PET se lavan para eliminar impurezas y son llevadas a un proceso de descontaminación para eliminar los residuos.
5. Fusión y extrusión: las escamas de PET se funden y se convierten en pellets de plástico.
6. Fabricación: los pellets de plásticos se utilizan para fabricar otros productos como botellas, envases o fibras textiles.

Sebastián Patiño, CEO y Fundador de Ecocity, aclara que las escamas PET son "las piezas resultantes del proceso de triturado" y que de igual manera "pasan por un proceso de paletizado para convertir el plástico en materia prima nuevamente".

Sin la realización de este proceso de manera adecuada, una botella puede llegar a demorar en degradarse entre 100 a 700 años. Esto, dependiendo de distintos factores como la exposición al sol, la humedad, cantidad de plástico utilizado, entre otros factores.

Dos de los elementos que componen las botellas y afectan en mayor medida el medio ambiente son el polipropileno y poliestireno. El primero no se recicla con facilidad y es usado también en empaques para alimentos, envases de yogurt, helados, pañales desechables, entre otros. El segundo es más sencillo de reciclar pero requiere de un proceso costoso, y es empleado también en cajas para cd, cubiertos desechables, máquinas de afeitar desechables y juguetes.

"No hay un componente en específico, sin embargo es perjudicial en gran medida el polipropileno y poliestireno debido a su complejo aprovechamiento, y dificultad para el reciclaje. Estos materiales no se reciben en muchas de las estación de clasificación y aprovechamiento que están autorizadas para captar material, se utilizan normalmente en la industria alimentaria", indica Patiño.

En cuanto a la duda de si realmente los botilitos puedan ser una solución o no, frente a los desechos por las botellas, Patiño menciona que estos pueden ser hechos con un material poroso, el cual va a terminar generando bacterias y malos olores. Esto va a tener como consecuencias que de igual manera terminen siendo desechados. "En cambio recomendamos más el uso de vidrio para disposición de cualquier tipo de alimento o bebida. La producción de un botilito puede tener un impacto ambiental más alto en su producción y disposición final que las botellas de plásticas", opina el CEO de Ecocity.