Cada día se presentan cerca de 6.500 casos de enfermedades laborales en el país

Cada vez más, las compañías se interesan en el bienestar y en la salud de sus trabajadores, quienes, con un entorno laboral sano, puede potenciar su productividad y, por ende, contribuir de manera más fructífera a la empresa.

A pesar de este avance en concientización laboral, aún existen miles de personas que sufren enfermedades producidas por sus trabajos. Según informó la Organización Mundial de Trabajo, entidad consultada por la EAE Business School, al día se conocen cerca de 6.500 casos de enfermedades laborales en el país.

Las cifras mundiales revelan que alrededor de 1,9 millones de personas fallecen a causa de una enfermedad o un accidente producido por su trabajo, mientras que durante ese mismo periodo se presentan aproximadamente 360 millones de accidentes laborales no mortales, que provocan incapacidades por al menos cuatro días.

Regresando al plano nacional, el Consejo Colombiano de Seguridad dio a conocer que, durante la primera mitad de 2021, se registraron 302 muertes laborales, de las cuales 95 fueron provocadas por alguna enfermedad causada por el trabajo y, el resto (207) corresponden a accidentes mortales mientras la persona se encontraba en su oficio.

Al respecto, y con el fin de prevenir las muertes y las enfermedades laborales, Isabel Aranda, profesora de la EAE Business School aseguró que las empresas tienen la responsabilidad con sus empleados de crear estrategias de prevención por medio de acciones concretas, como distribuir cargas de manera justa y crear el ambiente laboral adecuado para las personas.

Este último factor es importante, aún más si se tiene en cuenta que en la actualidad, las enfermedades laborales que más se repiten tienen que ver con "el estrés laboral, cuadros ansioso-depresivos, trastornos músculo-esqueléticos, sus síntomas suelen ser dificultades para la vida cotidiana derivados del estrés, la ansiedad o las contracturas y el dolor", según indicó Aranda.

Ante esto, la experta recomienda que las empresas realicen, de manera anual, no solo chequeos físicos, sino también psicológicos y morales, en los que se evalúe cómo está el ambiente dentro de la organización y si existe la presencia de algún riesgo que pueda afectar la salud mental de los empleados que allí trabajan. Esto, con el fin de prevenir enfermedades de tipo psicosocial.

"Una temprana detección y correcto seguimiento hace más probable la reducción del absentismo laboral, el aumento de la productividad y la obtención de beneficios económicos que conllevan estos efectos", concluyó la profesora.