Algunos hábitos saludables que podría incluir en su lista de metas para este 2026

A pocos días de que se acabe el año, viene la pregunta: ¿cuáles serán los sueños y metas para el próximo año? Si bien muchos podrían enfocarse en logros materiales, viajes y demás, es importante que también piense en objetivos que le ayuden a crecer como persona y a mejorar su calidad de vida.

El primero de estos hábitos es la alimentación saludable, es decir, incluir frutas, verduras, granos, proteínas y grasas en su día a día. Esto lo puede hacer paulatinamente, descubriendo lo que prefiere y la manera de hacerlo sostenible en el tiempo. Tenga en cuenta también que las necesidades de su cuerpo varían de acuerdo al ritmo y estilo de vida que lleve, además de su edad.

Hacer ejercicio con regularidad también podría ser una suma importante a su lista de metas o vision board. Piense en sus gustos, en lo que le da tranquilidad y lo que le gusta hacer; seguro encontrará una actividad física que le ayude a mantenerse en movimiento a la vez que lo disfruta. Recuerde que el ejercicio no se enfoca solo en su apariencia, sino que también es bueno para su salud y, según la Fundación Clínica Shaio, se recomienda realizar al menos 150 minutos a la semana.

En esta línea, es importante que le dé el valor necesario a sus horarios de sueño, pues a diario debería tener entre siete y nueve horas de descanso. Así se logran reparar tejidos, almacenar nutrientes y aportar al funcionamiento correcto de su organismo. Todo sin dejar de lado la necesidad de recuperación tanto física como mental.

Y es que algunos de los hábitos anteriores pueden ayudarle al siguiente punto: aprenda a manejar el estrés. Aunque para cada persona puede ser diferente, podría encontrar el método ideal en el ejercicio, la meditación, las actividades que disfruta, la escritura o incluso ir a terapia o hablar con alguien de confianza. Recuerde que en ocasiones cambiar de perspectiva es necesario, y que decir “no” está lejos de estar mal.

Asimismo, podría implementar una rutina que le resulte cómoda y le permita trabajar en usted mismo, pues implica que estaría esforzándose a diario por sus metas. De la mano con esto, afianzar sus relaciones cercanas sería una meta interesante, ya que fortalecería su red de apoyo fundamental.

El siguiente podría no ser un hábito como tal, pero sí beneficiarlo en su día a día: suelte los hábitos tóxicos. Entre estos puede incluir alcoholizarse, fumar y consumir sustancias. Con ello, puede aportar a la prevención de enfermedades cardiovasculares y al cuidado de su estado de ánimo y calidad de vida.

Por último, pero no menos importante, trabaje en su higiene personal y en el orden de los espacios en los que habita. El primero de estos aspectos es relevante, pues en ocasiones suele hacerlo sentir más confiado, además de dar una buena imagen a las personas con las que convive. Con respecto al segundo aspecto, muchas personas dicen que el estado de su espacio es un reflejo de cómo están emocionalmente, por lo que ordenarlo podría ayudarles a pensar y a disminuir su estrés.