La fórmula de las gafas debe revisarse una vez al año para prevenir complicaciones
viernes, 19 de julio de 2024
El chequeo oportuno previene patologías silenciosas como el glaucoma. Expertos recomiendan complementar con consultas oftalmológicas
La exposición prolongada a diversas pantallas es una realidad que vive buena parte de la fuerza laboral en el mundo. Por ello, los ojos se convierten en una herramienta natural que los profesionales deben cuidar.
¿Cada cuánto es prudente revisar si debe cambiar los lentes? Los especialistas en optometría coinciden en que, al menos, una vez al año es necesario hacer el chequeo.
Laura Rueda, docente del pregrado de optometría de la Universidad CES, indicó que “las personas deben saber que cuando vienen a una cita de optometría no solo es para hacer un cambio de gafas porque, a veces, tenemos la fórmula correcta y aun así tenemos sintomatología y no todo lo que le ocurre a los ojos se corrige solo con mejorar esa fórmula”.
“En este momento, somos usuarios permanentes de computadores, tabletas y celulares; eso va agotando poco a poco otras habilidades visualesrelacionadas con comodidad y funcionalidad”, añadió.
Durante la consulta, se revisan habilidades como la capacidad de enfoque y la fuerza muscular. Además, enfatizó en que igualmente se debe realizar una consulta oftalmológica una vez al año para complementar.
De acuerdo con la experta, “es importante revisar anatómicamente cómo está el ojo, cómo está la retina y cómo está la presión intraocular para prevenir patologías relacionadas con el aumento de esa presión”.
La recomendación estándar es programar estas revisiones por lo menos una vez al año. Sin embargo, dado el uso intensivo que actualmente se hace de la visión, la especialista hizo notar que lo ideal sería hacer el chequeo una vez por semestre.
¿Y si no se hace el chequeo?
Aunque hay quienes piensan que no existe un desgaste evidente en sus gafas y que es innecesario revisarlas, hay varias consecuencias derivadas de esa autonegligencia.
“Por ejemplo, podemos hablar de patologías silenciosas como el glaucoma y otros cambios patológicos que pueden llegar a ser detectables con un examen sencillo. Otro riesgo es que la fórmula sí se desactualiza”, comentó la docente del CES.
Por su experiencia, señaló que “a veces llegan los pacientes y cuando uno les pregunta qué tan antiguas son sus gafas, pueden contestar que tienen cuatro años y cuando uno hace la revisión, resulta que la fórmula ha cambiado mucho. Ahí lo que puede suceder es la aparición de mucha sintomatología”.
En ese caso, se puede experimentar dolor de cabeza o astenopia, un padecimiento relacionado con la fatiga visual, un mal al que son propensos quienes dedican largas jornadas a las distintas pantallas.
Los factores relacionados con la aparición de cansancio incluyen la concentración visual en un objeto durante largo tiempo (la pantalla del ordenador), la mala iluminación y el paso de la luz natural a la luz artificial.
Tal como lo señalan métricas de la Organización Mundial de la Salud, OMS, se estima que hasta 70% de los pacientes están usando gafas que requieren un cambio y hay señales de que los ojos necesitan nuevos lentes.
Por ejemplo, son signos de alerta el ya mencionado dolor de cabeza, entrecerrar la mirada para observar o leer aun con las gafas puestas, experimentar fatiga o cansancio en los ojos y adolecer de visión borrosa.
Las recomendaciones
Laura Rueda expuso que si se presenta cualquiera de los síntomas mencionados, es necesario consultar con los especialistas. También es importante hacerlo si en la familia hay antecedentes de patologías como cataratas o glaucoma.
“Ante cualquier signo que nos sugiera que algo no está bien en los ojos, hay una señal para realizarse la revisión, la recomendación es no esperar argumentando que no se ha cumplido el año desde la última revisión, porque ya el cuerpo nos advierte lo que está sucediendo”, explicó.
La oftalmóloga Natalia Restrepo coincidió en que "las enfermedades oculares son muy frecuentes y la detección oportuna de las mismas ayuda al manejo adecuado. No solo la revisión y el cambio de gafas se debe verificar cada año, sino que el examen completo en consulta de oftalmología, nos permite a nosotros los médicos detectar y prevenir a tiempo posibles causas de cegueracomo el glaucoma, cataratas o enfermedades en la retina".
"Algunas condiciones como tener antecedentes familiares de padecimientos de los ojos, sufrir de otras enfermedades como la diabetes y tener defectos de gafas como la miopía, hacen más importante esta cita cada año", añadió.
Ricardo Arenas Posse, coordinador de educación de la Organización Santa Lucía, indicó que "cambiar los lentes a tiempo es crucial para mantener una salud visual óptima y prevenir problemas más severos de visión a largo plazo. No realizar la actualización de la formula oportunamente y mantener lentes desactualizados pueden ocasionar fatiga ocular, dolores de cabeza, mareos e incluso visión borrosa. Esto se debe a que el esfuerzo adicional que realiza el ojo para enfocar a través de lentes inadecuados genera tensión muscular y fatiga, incluso se puede presentar ambliopía o estrabismos".
"Aconsejamos realizar un examen visual completo al menos una vez al año, incluso si no se experimentan problemas de visión aparentes. La frecuencia de los cambios de lentes dependerá de la edad, condición visual, estilo de vida, etc. Hay que recordar que la salud visual es una inversión a largo plazo. Cuidar los ojos y cambiar los lentes a tiempo permitirá disfrutar de una visión clara y nítida durante muchos años", puntualizó.